El tiempo exhumo
varios miedos
Lentamente a
ritmo de los azarosos dardos
Que rodean
nuestros pasos como un suplicio
Entre tu
acogedor abrazo cual hospicio
Y mis silencios
que supiste comprender
Mas esta
historia inmortal jamás se podrá romper
Espinas muchas
hieren a ritmo de desesperanza
pero tu estupendo corazón sabe de templanza
acariciando más
de cerca nuestro planeta
abrazaremos
juntos mil silencios y mil alegrías
de la mano
llevaremos uno a uno todos los días
quieta,
silenciosa, la luna presagia una afrenta
Sin embargo el
azul protector de nuestros besos
Abriga este
idilio intrínseco de sueños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario