Instantes

(Cuando callar no es patético)

Inexplicablemente hoy las hojas tienen colores diferentes,

De tu sonrisa relucientes,

Paso a paso el viento acaricia mi espacio compartido,

Frígido a grito de un latido.

Detenernos nunca, no hay estancias

Guíame rauda, muero de las ansias

Acércame de la oda a la lira,

No tomes descanso hasta la pasión eterna

Y Repudia la cornisa que en la esquina gira,

 Toma la medida exacta del veneno que serena,

Asfíxiame lentamente,

Esta noche seré enardecidamente,

hemoadicto,

A golpe de saborear el líquido,

Sangre y nada más,

Vivir, entrar, que pronto despertaras,

Seguiré,

Seguiremos.

En la tierra de los sueños,

De la mano llegaremos,

Y al abrir tus ojos,

El silencio amaremos.

G.C.